El buen hacer a fuego lento 🔥
Hay sonidos y aromas que abren el apetito al instante, y el chisporroteo de unas buenas gambas al ajillo es uno de ellos. Preparamos este clásico imprescindible como manda la tradición, con la receta de toda la vida que te transportará a tu bar favorito.
Seleccionamos unas gambas de calidad excepcional, frescas y jugosas, de las pescaderías de confianza de Colmenar Viejo. Las cocinamos en el momento en una cazuela de barro con un buen aceite de oliva virgen extra, ajos laminados que se doran lentamente y una guindilla que le da ese punto picante y alegre, pero sin pasarse.
Llegan a tu mesa aún burbujeando, con un aroma espectacular que lo inunda todo. Es un plato para disfrutar sin prisas, donde mojar pan en el aceite de ajito es casi tan importante como las propias gambas.
Un homenaje a la cocina sencilla y sabrosa, hecho con el corazón y los mejores productos de nuestra gente. ¡No te olvides de pedir una ración de pan!